El huerto escolar
La vista se recrea en él,
repeinado se le ve
con surcos alineados
dulcemente trazados.
Se levantan cuatro palos
cuan pendones enarbolados
para espantar a curiosos redomados.
Crecen hermosas las verduras
plagadas de verdes satinados
y las fresas proliferan puras
sobre el terreno antes aletargado.
El riego les da hermosura,
tras el invierno acabado,
de colorado ya madura.
Piedras de colores
son testimonio perenne
de los niños pintores
de cada curso
indemnes.
Todos ellos aprendieron presto
el hermoso proceso
de creación del huerto.
Recreando el suceso
evocarán su paso enhiesto
para cuidar la vida a sus pies puesto.
El limonero, en un rincón, observa atento.
Aprender a aprender
vale con esto.
Luis Carlos Olea
El Huerto de mi cole
En el huerto de mi cole
preparamos el terreno
con ayuda de otro cole
abonamos nuestro suelo.
Pronto hacemos los surcos,
la lluvia hace su trabajo,
plantaremos las semillas
que crecerán sin reparo.
Veremos las plantas crecer
y las cuidaremos con esfuerzo y ¡Mucho esmero!
y allá por la primavera.....
Los primeros frutos recogeremos.
Al huerto de mi cole,
lo cuidamos con mucho amor,
por eso las plantas crecen
en el Almanzor.
Arancha e Inma
preparamos el terreno
con ayuda de otro cole
abonamos nuestro suelo.
Pronto hacemos los surcos,
la lluvia hace su trabajo,
plantaremos las semillas
que crecerán sin reparo.
Veremos las plantas crecer
y las cuidaremos con esfuerzo y ¡Mucho esmero!
y allá por la primavera.....
Los primeros frutos recogeremos.
Al huerto de mi cole,
lo cuidamos con mucho amor,
por eso las plantas crecen
en el Almanzor.
Arancha e Inma
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